En la posición estratégica de este rellano, en 1808 los franceses colocaron un cañon para la defensa del sur de la isla. A principios de siglo y durante la permanencia de la densa colonia de artistas alemanes que iban allí a pintar, tomó el nombre de “Mahler Platte” (plazoleta de los pintores).
Desde aquí se pueden admirar los “Faraglioni” (farallones), el “Scoglio delle Sirene” (escollo de las sirenas), la “Certosa” (cartuja), los jardines de Augusto y la “Grotta delle Felci” (cueva de los helechos): importante lugar prehistórico, donde se han descubierto restos datados desde la era paleolítica hasta la edad del bronce.

Cómo llegar
Desde la plaza Umberto I, por las calles Madre Serafica y Castello (20 min.).